"Las ruinas circulares"
(Será tarea para el lector buscar
este famoso y extenso cuento sobre el que
muchos lectores han manifestado que les resulta muy difícil de
comprender).
En él encontraremos también la
reiteración de construcciones paralelas, mundos simétricos, además de una
altísima dosis de magia y fascinación.
Para acceder a él ofrecemos esta ayuda visual:
Este ideografísmo:
Un juego de visualizaciones que obligan a
observar y pensar:
Nuevamente se da, en
dos momentos (1 y 2) una
construcción repetida.
Esta vez formas
circulares, la de las ruinas, acompañadas por el fuego,
un fuego anterior,
destructivo, un fuego siempre presente en la amenaza.
Un fuego dueño de los
secretos del personaje y del hijo
engendrado.
Y un argumento cargado de riquísimas
sugerencias, complejo, de gran vuelo imaginativo:
Un mago que,
llegado a unas ruinas que tienen forma
circular, y que han sido
destruidas por el fuego, asume la tarea de crear, en repetidos sueños, un hombre, (H).
Tras ímproba tarea cargada de insomnios, desencantos,
imposiciones de su férrea voluntad, logra su propósito y crea una criatura a la que mágicamente un dios múltiple
insufla la vida.
Así “En el sueño
del hombre que soñaba, el soñado despertó”.
Acostumbrado este nuevo ser a la realidad y ya maduro, su padre debió enviarlo, y lo
hizo con dolor por la separación, a las
otras ruinas, otro templo que quedaba río abajo. Para que su hijo se creyera
“un hombre como los otros “le infundió el
olvido de sus años de aprendizaje”.
Un día se enteró de que el templo donde su hijo residía
había sido presa de las llamas. Lo afligió el pensamiento de que al tomar
contacto con su invulnerabilidad ante el fuego, el nuevo hombre descubriera su
naturaleza de
“mero simulacro” y sintiera la humillación de ser un
hombre soñado.
“A todo padre le
interesan los hijos que ha procreado...es natural que el mago temiera por el
porvenir de aquel hijo pensado entraña por entraña y rasgo por rasgo, en mil y
una noche secretas”...
Finalmente se
repitió lo acontecido hacía muchos siglos: el fuego volvió a estrechar sus
brazos en las primeras ruinas circulares, aquellas donde vivía el mago.
De esa manera, al caminar sobre él descubrió que su propia carne era invulnerable.
Entonces comprendió, con dolorosa humillación que él
mismo era, también, una criatura soñada. (“que
otro lo estaba soñando”).
Extraño juego de repeticiones, de mágicos
reflejos, es éste creado por Borges.
Extraño juego que está
casi siempre presente de una o de otra manera en cuentos, poesías y aún
ensayos de este notable autor argentino.
Esperamos que al
leerlo con detenimiento disfruten de este cuento circular que usted, sus
alumnos, encontrarán en cualquier biblioteca, leerán repetidamente y... ¡Después querrán tenerlo para siempre!
No sin
nostalgia cerramos las OBRAS COMPLETAS de Jorge Luis Borges.
Después de haber
vivenciado “El fin” – cuento en el que los mundos paralelos son los ambientes-
, “El cautivo”- las simetrías se dan en
las vidas mismas de los protagonistas- y tantas otras atrapantes dimensiones
humanas, queda abierta la inquietud, el deseo de conocer más sobre este autor.
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